1.- No excluir a nadie por falta de recursos.

 

2.- Propuestas honestas en los objetivos formativos o de

     acompañamiento (que no exageren los alcances y los

     logros).

 

3.- Visión positiva de otras asociaciones (sin actitudes de

     superioridad, de denigración o de competencia).

 

4.- Aceptar a los colaboradores voluntarios, agradeciéndoles

     su compromiso y sin exigirles demasiado; estimularlos sin

     presionarlos.

 

5.- Autocrítica constante de lo que hacemos y logramos:

     verificación constante y puesta en discusión de nuestros

     objetivos, modalidades de realización y éxitos.

 

6.- Apertura a nuevas propuestas y respuestas al

     sufrimiento; dar respuestas novedosas a los desafíos.

 

7.- Crear un clima de fraternidad y comunión,

     aceptándonos también con los defectos y limitaciones.

 

8.- Colaborar con los profesionistas del mundo de la salud

     y la asistencia.

 

9.- Ofrecer una propuesta de formación y de

     acompañamiento “laica” (no confesional)

     y al mismo tiempo “inspirada” en la antropología

    cristiana.

 

10.- Apegarse a la legalidad.

 

• Vocación de servicio. Saberse responsable de dar respuesta a las necesidades de la persona que acude, con respeto a su dignidad, confidencialidad y disponibilidad para atenderlo en su integridad con empatía y calidez.
• Compromiso. Asumir con entrega y pasión todas las actividades para realizar bien el trabajo y  dar lo mejor de uno mismo.
• Superación personal. Alentar el deseo en cada persona de ser mejor, descubrir sus capacidades y recursos, a través de procesos formativos para la búsqueda de la excelencia. Vivir la actitud de la humildad para poder aprender y experimentar nuevas iniciativas.
• Responsabilidad comunitaria. Existimos para ofrecer un servicio a la comunidad que contribuya a humanizar las situaciones de sufrimiento, las relaciones e instituciones del ámbito de la salud, impulsar la solidaridad y los cambios en la sociedad.
• Visión integral de la persona. Reconocer la integridad del ser humano en todas sus dimensiones: biológicas, psicológicas, sociales y espirituales para motivar el acercamiento compasivo, alentar la esperanza y el deseo de trascendencia.
• Ética. Comportarse honestamente y hacer el bien; propiciar la inclusión, el trabajo en equipo interdisciplinario, la comunicación directa y la transparencia en todas las acciones.